A preguntas de los medios en una rueda de prensa, Ferrer ha indicado que aún no tiene el resultado definitivo del estudio porque, además de la inspección visual y de la toma de imágenes y del estado de la torre, se ha hecho un análisis del estado de la piedras mediante catas en diversos lugares, lo que es "un poco más laborioso y lento".

Tras señalar que la Catedral tendrá "pronto" el resultado de ese análisis, ha apuntado que lo que sí que le han adelantado es que la torre está "en bastante buen estado" y que la fachada más afectada por el viento y el agua es la de la pared que mira hacía el río, "un poco hacía el oeste".

"Pronto esperamos tener el resultado definitivo y no solo el resultado, sino también la propuesta de cómo intervenir para mejorar y solventar los problemas que puede plantear la torre", ha concluido el deán de la Catedral.