La primera detenida habría cobrado 8.138 euros de forma fraudulenta en conceptos de Renta de Garantía de Ingresos (RGI) y de Prestación Complementaria de Vivienda (PCV).
Respecto a los otros tres detenidos, que regentaban dos restaurantes en
Bizkaia, se les imputan delitos de favorecimiento de la inmigración clandestina y contra el derecho de los trabajadores por tener trabajando a ciudadanos extranjeros en situación irregular.
La operación ha sido desarrollada por la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Bizkaia, perteneciente a la Jefatura Superior de Policía del País Vasco.
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