Los habitantes de 18 municipios de la segunda corona de tarificación de la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) –entre los que se encuentran Sant Cugat del Vallès, Ripollet, Cerdanyola del Vallès o Molins de Rei– pagarán a partir del próximo 1 de enero el precio del transporte público equivalente a los títulos de una zona del sistema tarifario integrado.

Gracias a la creación de una tarifa plana de transporte, los viajeros de la  segunda corona pagarán por el billete  el mismo importe que los usuarios de la primera, siempre que no salgan de los límites metropolitanos. Así pues, la rebaja no supone que los municipios cambien de corona. De esta manera, los 36 municipios que conforman el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB), y que alojan a 3,2 millones de personas, pasarán a estar bajo la tarifa plana del AMB, cuya aplicación y entrada en vigor (a fecha del 1 de enero de 2019) aprobó ayer el consejo de administración de la ATM.

Todos los títulos de transporte actuales están incluidos en la tarifa plana a excepción de la T-16 y los títulos sociales del AMB y Ferrocarrils de la Generalitat (FGC). Por lo tanto, sí entran en la tarifa plana la T-10, la T-10 para trabajadores del aeropuerto, la T-50/30, la T-70/30, la T-Mes, la T-Mes para desempleados, la T-Trimestre,  la T-Jove, los títulos integrados bonificados para familias monoparentales y numerosas, la T-Dia, la T-Aire y la T-Esdeveniment.

El ahorro para el bolsillo será del 50% en el caso de laT-10 y del 26% en el de la T-Trimestre, la T-Jove y la T-Mes. Los billetes sencillos no integrados de FGC, Rodalies de Catalunya y autobuses metropolitanos e interurbanos también se regirán por la tarifa plana cuando cubran el trayecto entre dos municipios situados dentro del AMB.

El vicepresidente de Mobilitat i Transport del AMB, Antoni Poveda,  explicó este miércoles que la tarifa plana acaba con «el agravio comparativo con la segunda corona» que se produjo en la primera integración de tarifas de los 18 municipios de la primera corona, que tuvo lugar en 2000, y que ha sido una «larga reivindicación» de estas poblaciones durante los últimos 18 años.

El sobrecoste para las administraciones de esta rebaja se asumirá con 17 millones de euros aportados por el AMB que el ente supramunicipal recaudará a través del Tributo Metropolitano que pasarán a pagar los residentes en los 18 municipios beneficiados.

Esta tasa se calcula en base a un porcentaje del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de cada vivienda. La integración tarifaria costará 23 millones de euros. Los seis millones restantes se esperan sufragar con el aumento de ingresos producido por un mayor número de validaciones en el transporte público a raíz de la tarifa plana.

El aumento previsto es de 4,6 millones de nuevos viajes, llegando a los 55 millones de trayectos anuales. Durante el primer trimestre de 2020, la ATM tendrá calculado el déficit presupuestario definitivo que deberá asumirse por parte de las administraciones.

La tarifa plana es, en consecuencia, el primer paso del cambio de modelo en las tarifas del transporte público, que entrará en su segunda fase con la puesta en funcionamiento de la T-Mobilitat en 2021, con dos años de retraso respecto al calendario inicial. Ese mismo año se llevará a cabo la prueba piloto previa a su despliegue en el transporte.

Este nuevo título tendrá un soporte digital basado en la validación sin contacto (con tecnología contactless) y se centrará en los kilómetros recorridos por el usuario y en la recurrencia en el uso del transporte, premiando económicamente a los viajeros que más utilicen el transporte público.

La T-Mobilitat permitirá que municipios como Mataró, que con la tarifa plana mantiene los precios actuales, los vea rebajados. «El objetivo de este nuevo modelo es reforzar el servicio público como sistema único global, facilitar los desplazamientos en transporte público y luchar contra el cambio climático», aseguró este miércoles el conseller de Territori, Damià Calvet.

La teniente de alcalde de Urbanisme, Mobilitat i Ecologia del Ajuntament, Janet Sanz,  reclamó este miércoles la congelación de las tarifas para 2019. Y recordó que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) del Gobierno central incorporan una partida que aumenta la financiación del transporte público en 42 millones de euros.