Nueva solución a los problemas familiares:
expertos en los servicios públicos

  • Al menos uno de los miembros de la familia que pida la ayuda deberá estar empadronado en el País Vasco.
  • Se tratarán problemas de pareja, disputas por herencias, conflictos con familias de acogida...
  • Quedan excluidos los problemas de violencia doméstica.
El Parlamento Vasco ha aprobado, con el respaldo de todos los grupos, salvo EHAK, la ley de Mediación Familiar, que regula este procedimiento para ayudar a las familias en conflicto a alcanzar soluciones y acuerdos amistosos, sin recurrir a la vía judicial.

La nueva norma incluye la mediación familiar dentro del marco de los servicios sociales y señala que podrá llevarse a cabo
a través de los servicios públicos y de iniciativas privadas.

Contempla esta figura como un procedimiento que "consiste en la
intervención de terceras personas, imparciales y expertas, que ayuden a las partes en conflicto a alcanzar, por sí solas, soluciones y acuerdos amistosos".

Podrá ser objeto de mediación familiar cualquier conflicto que surja en el seno de la unidad familiar, no sólo los relacionados con
rupturas de pareja, sino problemas entre hijos, entre familias biológicas y de acogida, entre progenitores y abuelos, a causa de las
herencias, o entre personas dependientes y familiares.

La ley esta pensada para unidades familiares y grupos convivenciales conformados por, al menos, una persona empadronada en el País Vasco.

A través de la ley, se creará un registro de personas mediadoras, así como el consejo asesor de mediación familiar, como
órgano asesor del Gobierno Vasco.

El consejero de Vivienda y Asuntos Sociales, Javier Madrazo, ha defendido que la mediación "ofrece un entorno propicio para el diálogo y el acuerdo" y que "reduce y previene la conflictividad en el seno de las relaciones familiares y, de manera especial, en los de menor edad".

Ha recordado que este servicio está implantando en la Unión Europea y ha dejado claro que
no podrá ser utilizado en casos de violencia en el seno familiar o para supuestos constitutivos de ilícito penal, al tiempo que ha indicado que se trata de un servicio "voluntario, confidencial, transparente y flexible".

Asimismo, ha destacado el "alto grado de consenso" alcanzado en torno a la ley entre los partidos políticos y ha dicho que "todos compartimos una misma concepción de la mediación, al servicio de la paz, la convivencia, la comunicación, el dialogo y el acuerdo entre las personas de las unidades familiares".
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