O les proporcionan dos policías que vigilen las 24 horas del día, ya sean de la Guàrdia Urbana o de los Mossos d'Esquadra, o cortarán la calle indefinidamente hasta que les den "una solución", y empezarán esta misma semana. Este es el ultimátum que han dado al Ayuntamiento y la Generalitat vecinos de la calle Riera Baixa, en el Raval de Barcelona, que denuncian una creciente inseguridad desde este verano en la esquina con Hospital. "Es el punto más conflictivo del barrio y no entendemos por qué no se hace nada", ha apuntado este lunes Santi González, miembro de la entidad Acció Riera Baixa.

González ha explicado que "se están traspasando líneas rojas", porque "mientras que antes había dos robos por semana, ahora hay cuatro al día", muchos perpetuados por "menores desatendidos", porque ven continuas peleas "con cuchillos" y porque se amenaza a vecinos y comerciantes "con armas blancas" por quejarse de ruidos, por ejemplo. "Está en juego nuestra integridad física", ha dicho.

Ha contado también que este lunes han presenciado dos enfrentamientos en Riera Baixa con Hospital, el domingo otros tres y el sábado, unas 15 agresiones machistas, y ha atribuido el incremento de la delincuencia a "las políticas neoliberales de los últimos 30 años, que ponen el foco en el turismo y abandonan a los vecinos".

La asociación Acció Riera Baixa tiene prevista una asamblea el jueves a la que, según ha apuntado González, asistirá la regidora de Ciutat Vella, Gala Pin. Tras la reunión, si las demandas vecinales no se ven satisfechas, empezarán "el viernes o el sábado" a cortar la calle Hospital, "por turnos", para que la interrupción sea continua. "Es la principal vía de acceso a la Rambla del Raval" y se usa normalmente para la "circulación de ambulancias y coches patrulla", ha señalado González.