En concreto, el Gobierno local socialista ha explicado que "sólo hay una propuesta remitida al consejo de administración de Emasesa" y "aún en estudio" respecto a las tarifas de 2019, que implicaría una "actualización" de las facturas de agua con una media del 1,7 por ciento, por debajo por tanto de la evolución del 2,2 por ciento del IPC.

"Esta actualización del 1,7 por ciento está planteada a través de dos medidas. Por un lado, la cuota de abastecimiento (que representa en torno al 50 por ciento de las facturas del agua) queda completamente congelada, mientras la cuota de saneamiento (que representa en torno al 45 por ciento de los recibos) se incrementa un 3,8 por ciento", con lo que como media en los recibos, "la incidencia sería de una actualización del 1,7 por ciento, por debajo por tanto del IPC".

El objetivo de esta propuesta es que, "ante un escenario de continuidad en el descenso del consumo de agua, generar los recursos necesarios para realizar inversiones en la red de depuración del agua necesarias para el servicio". Se trata del tratamiento de lodos procedentes de EDAR, la eliminación de fósforo en las EDAR, el incremento del control de vertidos y medio receptor, el reforzamiento de acciones de limpieza en grandes colectores, etcétera.

"Esta propuesta de revisión de las tarifas por debajo del IPC para mejorar el sistema de depuración está planteada para su debate por parte de los miembros del consejo de administración y aún se encuentra en estudio. En caso de que finalmente se aprobara, el gobierno adoptará todas las medidas oportunas para que la tasa de basura quede congelada, tal y como está prevista", alega el Gobierno local socialista.