La Policía Municipal de Bilbao ha decomisado esta pasada noche 40 kilos más de alimentos que no cumplían con las condiciones higiénico sanitarias establecidas en cuatro intervenciones sobre puestos ambulantes, según ha informado este miércoles la Concejala Delegada del Área de Salud y Consumo, Yolanda Díez.

Los 40 kilos corresponden principalmente a carne en mal estado ya condimentada y tratada con determinados ingredientes dispuestos para la elaboración de pintxos morunos y que ha sido retirada de varios puestos callejeros no autorizados, a los que se ha retirado el producto y han quedado clausurados.

Hasta la noche del martes y desde el pasado sábado, la Policía ha Municipal ha incautado un total de 60 kilos de productos perecederos. El Consistorio bilbaíno ha recordado de forma reiterada que el año pasado se hallaron productos para el consumo humano que estaban escondidos en alcantarillas y papeleras.

Yolanda Díez ha reconocido que en lo que va de Aste Nagusia se llevan requisados "más kilos" que en anteriores ediciones, pero eso no significa por ahora "que haya este año más puestos con alimentos en mal estado y eso no lo sabremos hasta el final de Aste Nagusia, cuando hagamos el balance de datos".

Durante la inspección sanitaria y alimentaria realizada este miércoles en el recinto de txosnas junto al jefe del subárea de Seguridad Alimentaria, Jon Uribarri, la concejada delegada ha recordado a los consumidores que adquirir e ingerir estos alimentos en los puestos ambulantes es "una ruleta rusa" y ha apelado a la responsabilidad personal de cada uno porque realmente se van a ahorrar poco dinero y las consecuencias que hay en juego para su salud pueden ser graves".

Díaz ha calificado de "excelente" el estado higiénico sanitario en cuanto a la seguridad alimentaria en las txosnas y merecedora de una nota "extraordinaria".

TRES INSPECCIONES

Las correcciones más habituales que tienen lugar están relacionadas con aspectos como la temperatura a la que se encontraban los productos frescos, los espacios donde se tienen que cortar alimentos que no están cocinados, que los productos de limpieza estén en los recipientes higiénicos adecuados y el estado de las instalaciones y los materiales y superficies donde se manipulan los productos.

El Ayuntamiento de Bilbao lleva a cabo en torno a la Aste Nagusia tres inspecciones como mínimo en el recinto festivo. En la previa al inicio de las fiestas, las comparsas informan de lo que van a vender en su txosna y entregan una memoria.

Ya durante las fiestas, los inspectores se visitan todas las txosnas para comprobar que es correcto todo lo que se indica en la memoria y se hacen otras dos visitas más a lo largo de la semana ya sin avisar y de forma aleatoria se seleccionan varias txosnas. Cuando se detecta alguna corrección que hacer, la visita posterior es más exhaustiva.