La declaración de emergencia se justifica en la necesidad de reconstruir los tramos de carretera que han desaparecido o sufrido desprendimientos y ocasionado cortes de carretera, con el fin de evitar riesgos a la circulación de vehículos.

La carretera AV-901 como consecuencia de las copiosas lluvias y nevadas del invierno se ha de deslizado un tramo de terraplén y han, desaparecido unos 30 metros en el punto kilométrico 12+150, entre las localidades de Villanueva de Ávila y Mijares, por lo que los usuarios de la vía tienen que desplazarse por itinerarios alternativos, con un incremento considerable de kilómetros en el trayecto.

Las obras consistirán en el encauzamiento de las aguas, restauración de la obra de fábrica transversal que ha sido arrastrada por la corriente de agua, formación de una escollera en el pie del terraplén y formación del propio terraplén.

La segunda obra, la BU-550, de Trespaderne (BU-530) al límite con el País Vasco, ha sido declarada también de emergencia porque como consecuencia de las lluvias y nevadas del invierno se ha producido el derrumbe de parte del terraplén de la margen derecha de la carretera, en el punto kilométrico 12+850, quedando prácticamente en voladizo en una longitud de unos ocho metros.

Consecuentemente se ha procedido al corte de ese carril derecho de circulación, habilitando la zona de cuneta del sentido izquierdo al tráfico para desplazar lo máximo posible la circulación hacia ese lugar y evitar así la zona central de la calzada y se han colocado semáforos para dar paso alternativo.

Las obras en ese tramo consistirán en el corte total de la carretera, con señalización de desvíos provisionales, excavación y levantado de toda la carretera en una longitud de 15 metros, realización de dos filas de micropilotes, construcción de cargaderos de apoyos de vigas, colocación de vigas prefabricadas de hormigón y reconstrucción del firme y reposición de señalización y balizamiento.