Así, para esta acción ha contado con la ayuda de escolares del Colegio de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Jacaranda, y la participación del delegado de Naciones Unidas en Málaga, Julio Andrade.

La directora de marketing de Sea Life Benalmádena, María Morondo, ha afirmado que "el objetivo es concienciar sobre la necesidad de reducir el uso del plástico, su reciclaje y su recolección en sitios habilitados; debemos ser conscientes del peligro que supone su vertido en los mares y océanos, ya que es vital para nuestra subsistencia".

Tanto los alumnos, como profesores, y los integrantes del equipo Sea Life han podido comprobar sobre el terreno el gran perjuicio que, consciente o inconscientemente, el hombre está causando a los mares.

"Es muy importante la concienciación de los más pequeños y exigir un compromiso firme por parte de los gobiernos, instituciones y todas las administraciones, sin ellos conseguir avances notables, es muy complicado. Casos como el de la ballena que contenía 80 bolsas de plástico en su interior se multiplicarán y provocarán el fin de la vida marina", ha explicado.

Según los estudios de diversas fundaciones, en 2050 habrá en el océano más toneladas de plástico que de peces. Cada año entran al mar unos ocho millones de toneladas de plástico.

Por su parte, la ONU ha vuelto a lanzar un SOS en materia de limpieza de mares y océanos. La temática del Día Mundial del Medio Ambiente 2018 es 'Un planeta sin Contaminación por plásticos. Rechaza lo que no puedes reusar'. Sea Life se adhiere a nivel internacional a las acciones de esta campaña.

Por último, han recordado que se calcula que alrededor de ocho millones de toneladas de residuos de plástico llegan a los mares del mundo y entran a la cadena alimentaria, poniendo en riesgo la salud humana. Asimismo, se estima que en poco más de una década, la producción de plástico se duplicará, de ahí la necesidad urgente a fomentar un diálogo global para replantear la forma en la que producimos, usamos y gestionamos el plástico.