Perros disfrazados de huertanos, princesas, con la equipación del Barça, gatos, reptiles, peces y hasta un auténtico loro ‘pirata’, llamado Kiko, acudieron ayer a la misa de 12.00 en las parroquias de los barrios de San Antón de Murcia y Cartagena. Como cada año, sus dueños, fueron a por la bendición de sus mascotas.

«Llevo toda mi vida viniendo a bendecir a mis mascotas. Es una tradición que me enseñaron mis padres. Ellos traían el ganado del campo para que no enfermaran y no perder el trabajo», nos contaba ayer María Dolores Casado.

Un panecillo y dinerillo

Al lado del lugar de bendición, un centenar de personas hacían cola ante un puesto donde venden los tradicionales panecillos de San Antón, «elaborados con una fórmula secreta que permite que después de dos años estén igual que el primer día», explicó una de las vendedoras.

La tradición dice que hay que guardar un panecillo en el monedero, dejarlo un año y al año siguiente sustituirlo por otro nuevo y comerse el antiguo, «para tener suerte y no quedarse sin dinero», explicó María Teresa.

La festividad de San Antón no ha hecho más que empezar. El barrio cuenta con un programa festivo que comenzó el viernes pasado y finaliza este domingo. Así, mañana se entregarán los premios del concurso infantil de dibujo y comenzará el de gastronomía. El sábado será la procesión y el domingo habrá misa y fiestas de despedida en el barrio.

Esto dicen los amos de sus mascotas

Sonia Martínez, con su loro Kiko. «Ésta es la primera vez que lo traigo, pero no va a ser la última. Mi loro es un animal buenísimo y muy divertido. Juego con él al escondite, le gusta que le pases el secador y que lo saques a pasear al parque con los niños».

Manoli Tomás, con su perrita Nusa. «Mi perra es muy mala. Soy de Lorca y he traído a mi perrita Nusa para que la bendiga San Antón a ver si se vuelve más tranquila. Espero que haga algo, pero si no lo hace la voy a querer igual».

Loli Moñino, con sus dos perros y un gato. «Me gusta disfrazar a mis mascotas por San Antón. Este año he vestido a mis dos perritos, a uno con la equipación del Barça y al otro de huertano. Al gato lo he dejado sin traje porque no dejaba de arañarme».