El sistema, en trámite de patente europea, consiste en una malla con una geometría concreta que se coloca alrededor de la estructura en cuestión, rompiendo la estela y minimizando las fuerzas que el agua realiza sobre la instalación.
La malla se ha probado en el canal hidrodinámico de la URV, en funcionamiento desde 2011 y con los recursos necesarios para simular corrientes marinas ultracontroladas y las plataformas petroleras, y ahora está pendiente de testarse en el mar.
SISTEMA INNOVADOR
Los sistemas realizados hasta la actualidad permitían disminuir las vibraciones derivadas de las corrientes marinas, pero aumentaban el arrastre y el peso que la instalación en cuestión debía soportar.
En cambio, este sistema elimina las vibraciones y oscilaciones marinas sin necesidad de contrarrestarlas mediante un aumento del peso de la estructura.
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