Preguntado acerca de si fallaron los controles y de si tiene constancia de cuándo empezarán las inspecciones en las pirotecnias gallegas, el presidente se ha limitado a manifestar que se "seguirá trabajando" y ha recordado que, poco después de la explosión de Tui, llamó al delegado del Gobierno, Santiago Villanueva, para pedirle dicho plan de inspección.

Ha recordado que también hizo una llamada, que ha reiterado este lunes, para que los vecinos próximos a este tipo de instalaciones, alerten "si ven algún movimiento de personas que trabajan en pirotecnias llevando objetos a determinados lugares". A su juicio, es clave que "activen esa denuncia y ese conocimiento".

En todo caso, ha remarcado que la pirotecnia 'La Gallega' "llevaba 60 años trabajando" y se ha preguntado como su propietario pudo "localizar los explosivos" en ubicaciones próximas a las casas "de parientes y vecinos". Feijóo ha incidido en que se trata de "una negligencia muy grave", que "corresponde concretar a los jueces".

"Lo que sí digo es que a la Delegación del Gobierno le pedí y asumió un plan de inspección de las 19 instalaciones pirotécnicas que hay en Galicia, y a todos los vecinos lo que les pido es que nos llamen si hay alguna previsión o duda de que pueda haber almacenado explosivos en cualquier lugar", ha apelado.

No en vano, ha concluido el presidente, realizar este tipo de almacenaje ilegal es "un atentado contra el sentido común y contra la vida de las personas, como esos padres que dejaron huérfanos a sus dos hijos", en referencia a las dos víctimas mortales de la explosión.