El alcalde ordena echar del pleno a los vecinos por gritarle «cobarde»

La Policía los identificó y les tomó declaración. La sesión plenaria se preveía polémica, y así fue. Tras medio año de protestas y más de diez soportando las consecuencias de la movida nocturna a las puertas de sus casas, los vecinos afectados por el botellón vieron ayer cómo se esfumaban sus esperanzas de conseguir que el Ayuntamiento prohibiese beber en la calle. Pero no se callaron.

«¡Esto es pura demagogia!» o «¡Losada, es usted un cobarde!», fueron los gritos lanzados por estos vecinos desde lo alto de la segunda planta del Palacio Municipal, custodiados por cuatro agentes de la Policía Local. Y el alcalde, sin cambiar el gesto, sentenció:

«Ruego a los miembros de seguridad que los desalojen»;  ante esta orden, una de las afectadas respondió: «Antes de que nos eches, nos vamos nosotros». En la puerta los policías los identificaron y les tomaron declaración de lo que habían dicho, además de impedir el paso de los periodistas hasta la zona del público. La plataforma estudiará ahora el texto para presentar alegaciones.

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