La Confederación Hidrográfica y el Ayuntamiento inician las obras para rehabilitar el Jardín Americano de la Expo 92 cinco años después de anunciarlas.

El estado actual deja claro el abandono que ha sufrido desde que finalizó la exposición universal.

El 60% de las 615 especies que albergaba han desaparecido, esta tomado por colchones, mantas y otros enseres de los indigentes que allí duermen, la basura se acumula en los rincones, las vigas de madera del invernadero han sido arrancadas para hacer fogatas y la zona se encuentra repleta de aislantes de cables que han sido arrancados para sacar el cobre.

Esta misma semana las máquinas entrarán en la zona para comenzar unas obras que vienen prometiéndose desde 2003. El problema: la falta de dinero (ese año sólo se presupuestó 240.000 1) y la complejidad del suelo. Esta ribera de Cartuja pertenece parte a la Junta , parte al Estado y parte al Ayuntamiento .

PASEO FLOTANTE Y JUEGOS DE AGUA

El proyecto de rehabiliación medioambiental que ahora arranca recuperará la ribera a lo largo de cuatro kilómetros, desde el puente del Cristo de la Expiración hasta el Alamillo, con jardines, paseo flotante y juegos de agua.

El objetivo: que los vecinos puedan disfrutar junto al Guadalquivir desde el Paseo de la O hasta la entrada del parque. Las obras actuarán sobre 140.000 m2 y durarán 12 meses.

Tendrá carril bici, que llegará hasta el puente del Alamillo, y peatonal. La plataforma flotante partirá desde los jardines del Monasterio de la Cartuja e irá en paralelo al Jardín Americano hasta llegar a los jardines del Auditorio.

En la zona del jardín Americano se rehabilitarán las especies y el invernadero, se creará una laguna artificial y se recuperarán los juegos de agua (fuentes, acequias) que había durante la Expo y la esclusa.

Esta zona, por razones de seguridad, habrá horario de apertura y de cierre. En el jardín del Auditorio se habilitarán plataformas recreativas sobre la lámina de agua.

De allí, las obras proseguirán por los jardines del Guadalquivir, el jardín del Teatro (junto al teatro Central) para llegar hasta la entrada del Alamillo, aunque sin tocar la zona de la ribera donde se encuentra el Centro de Alto Rendimiento (CAR).