La Plataforma vecinal Seguridad del Norte (PSNorte) se quejó hoy de que sólo dos guardias civiles patrullan de forma permanente los cinco pueblos del norte de la región que dependen del cuartel de la Benemérita de Valdetorres del Jarama, algo que consideran "insostenible".

El director de PSNorte, Fernando Moreno, manifestó a Europa Press que en los municipios de Valdeolmos-Alapardo, Valdepiélagos, Talamanca del Jarama, Fuente el Saz y Valdetorres viven 14.000 habitantes todo el año, "aunque la población se multiplica por tres en fines de semana, festivos y vacaciones, ya que muchos ciudadanos empadronados en Madrid capital cuentan aquí con sus segundas residencias".

Además, señaló que la Benemérita debe atender muchos kilómetros de superficie, así como poblaciones y urbanizaciones muy dispersas geográficamente entre sí, "por lo que los agentes están más vulnerables, lo que les impide atender las emergencias policiales en un tiempo razonable".

"Los delincuentes se cachondean de ellos. Así, les hacen una llamada falsa diciendo que en un pueblo ha ocurrido algo para poder robar tranquilamente en otro", agregó.

Asimismo, el portavoz de Plataforma Seguridad Norte aseguró que los guardias civiles tienen que pagarse los chalecos antibalas de su bolsillo.

Personal veterano y desmotivado

Por estos motivos, solicita a la Delegación del Gobierno en Madrid que complete la plantilla del cuartel de la Guardia Civil en Valdetorres del Jarama y que la incremente, "pero con personal cualificado, no con principiantes que tienen que patrullar con un veterano".

"Un guardia civil de un municipio de la sierra norte de Madrid cobra lo mismo que en un pequeño pueblo de Sevilla, donde no hay tanta delincuencia y tanta carestía de vida, por lo que pedimos que se incentive este puesto de trabajo y así no se vayan a los dos años", añadió.

Por último, Moreno alertó de que en esta zona de la región están aumentando los delitos contra la propiedad y el número de bandas organizadas dedicadas al robó de chalés, y reclamó a los vecinos que denuncien todos los casos "para que la estadística obligue al Ministerio a poner más policías". "La población no para de aumentar y aquí hay chalés de un cierto nivel económico, y eso atrae a los atracadores", concluyó.