Su directora noruega, Julia Dahr, apasionada por las historias cargadas de temas sociales y medioambientales, presenta en 87 minutos un largometraje en el que lleva a reflexionar a sus espectadores sobre el medioambiente a través de la historia de Kisilu Musya, un granjero keniano y padre de familia que vive en primera persona los efectos devastadores del cambio climático.

En la historia, el granjero keniano al ver su situación decide usar su cámara para documentar los impactos del clima extremo en Kenia, convirtiéndose en testigo de cómo sequías y tormentas han forzado algunas personas a tener que abandonar a sus familias para buscar nuevos empleos.

Durante este proceso, Kisilu se ve involucrado en lo que será el viaje político más grande de su vida, según ha recordado la Diputación a través de un comunicado.

A finales del 2015, Kisilu viaja a París con motivo de la XXI Conferencia sobre el Cambio Climático, donde presenta su película a los delegados de las Naciones Unidas, para intentar tener voz en las conversaciones sobre el clima y dar un giro de 180 grados a las políticas medioambientales. Un viaje para explicar lo que esta pasando y lo que esta a punto de pasar en nuestro planeta.