Así lo indica el sindicato en un comunicado en el que subraya que viene manifestando, "desde 2017, la incertidumbre generada en el sector por la pérdida de carga de trabajo del programa C295 y C235, aviones de transporte militar que se realizaban

en las plantas de Airbus en Sevilla, produciendo 26 despidos en dichas factorías", de forma que "la repercusión en las empresas de la industria auxiliar del sector que trabajaban para dichos programas estaba ya notándose en el empleo".

Desde el sindicato señalan que "el anuncio de reestructuración y ajustes en las plantas de Airbus Sevilla afectará a 500 trabajadores de un total de 2.500 que trabajan en las plantas de Tablada y San Pablo", y aunque "la compañía no habla de ERE ni de ERTE, la merma del empleo en

Airbus será del 20 por ciento en Sevilla", según UGT.

Tras explicar que, en la actualidad, por cada trabajador de la empresa matriz Airbus hay cuatro mínimos de la industria auxiliar, el vicesecretario general de UGT-FICA Sevilla, Manuel Ponce, ha advertido de que "la repercusión en el empleo puede ser catastrófica para el sector aeronáutico en Sevilla y hacer peligrosa la supervivencia de muchas empresas", y conllevar "la pérdida de empleo de muchos trabajadores, y, por consiguiente, del futuro del sector".

El sindicalista ha aseverado que "Sevilla necesita del sector aeronáutico no sólo como una industria sólida, estable y cualificada, sino como motor de la economía sevillana", y desde UGT solicitan "una distribución proporcional de las cargas de trabajo para las factorías de Sevilla, desde el principio de la solidaridad y un apoyo incondicional, acompañado de la gestión que debe realizar la Junta de Andalucía y las administraciones local y central para revertir una situación que puede desencadenar en el desmantelamiento a medio y largo plazo del sector en la provincia de Sevilla".

Además, el sindicato reclama a Airbus "la activación nuevamente de la mesa provincial sectorial Aeronáutica de Sevilla, para abordar la situación generada en torno al sector".