Las tornas parecen que van cambiando. En 2007, el número de trasplantes de donante vivo realizados en hospitales andaluces se triplicó en comparación con las cifras de 2006.

Desde los años 90 del pasado siglo, en Andalucía se han contabilizado 65 trasplantes de este tipo. Sólo 26 se llevaron a cabo en 2007 (dos fueron de hígado), frente a los nueve de hace dos años.

Mientras, los casos en los que los donantes habían fallecido en accidente de tráfico, disminuyeron hasta un 53%. Sólo hubo 27 trasplantes de este tipo en 2007, frente a los 58 de 2006.

En 1991, los fallecidos en accidentes de circulación suponían el 40% de los donantes. El año pasado, eran un 11%.

Disminuyeron los donantes fallecidos en accidente y aumentaron los fallecidos por otras causas, pero al final sólo se registraron 245 donaciones, frente a las 259 de 2006.

Esto permitió que se llevaran a cabo 595 trasplantes de órganos y un millar de diferentes tejidos (22 menos que en 2006). 344 fueron de riñón, 175 de hígado, 37 de corazón, 26 de pulmón y 13 de páncreas.

Los hospitales Virgen del Rocío de Sevilla y Reina Sofía de Córdoba (174 y 139 intervenciones, respectivamente), fueron los centros hospitalarios que más trasplantes llevaron a cabo. Después, les siguieron el Carlos Haya de Málaga (102), Virgen de las Nieves de Granada (87) y Puerta del Mar de Cádiz (39).

Más datos

Tasa de donación. En 1991 se situaba en 13,9 donantes por cada millón de vecinos de la comunidad. El año pasado era 30 por millón.

Aumento. A principios de los años 90 del siglo pasado se realizaron 288 trasplantes, 307 menos que el pasado ejercicio.

Perfil. La edad media del donante fallecido ha pasado de 35 años (1991) a 55 en 2007. De hecho, el 18% de donantes del año pasado tenía más de 70 años e, incluso, en siete casos superaron los 80 años. Los donantes mayores de 60 años han pasado de ser el 6% en los años 90 del siglo XX a más del 40% el año pasado. La edad media de los donantes vivos fue 51 años.

Género. Seis de cada diez donantes fallecidos eran hombres. Mientras, el 80% de los donantes vivos eran mujeres (en el 65% de los casos, los receptores fueron hombres).

Parentesco. En el 42% de los trasplantes de donante vivo el donante fueron padres y madres y los receptores sus hijos. En un 31%, se produjo entre parejas (un cónyuge dona al otro), un 23% se dio entre hermanos y un 4% entre amigos.

Lista de espera. Actualmente, 862 andaluces esperan un trasplante: 665 de riñón, 153 de hígado, 23 de pulmón, 12 de corazón y 9 de páncreas.

Aceptación. Los trasplantes están aceptados por el 82% de las familias de la comunidad, frente al 62% de 1991. La cifra llega al 90% en Córdoba y supera el 87% en Granada. Por contra, en Huelva y Jaén no alcanzan ni el 70%.

Récord. En diciembre se registraron 31 trasplantes, es decir uno por día, la cifra más alta de la historia, según Manuel Alonso, coordinador autonómico de Trasplantes.

Trasplante en dominó

De los 175 trasplantes de hígado del año pasado, cuatro casos (tres en el Virgen del Rocío y uno en el Carlos Haya de Málaga) fueron trasplantes hepáticos secuenciado o trasplante en dominó.

En este caso, el hígado de un paciente fallecido se trasplanta a una persona que es portadora de una enfermedad conocida como Polineuropatía Familiar Amiloidótica o Enfermedad de Andrade.

A su vez, el hígado de este enfermo va a parar a otra persona, por lo que se producen al final dos trasplantes.

Esta patología provoca que el hígado sintetice una variante anómala de la proteína transtirretina, que se deposita lentamente en las terminaciones nerviosas.

A los 25 o 30 años aparecen los síntomas y 15 años después se produce la muerte.

La enfermedad, que afecta al sistema digestivo, cardiovascular y ocular entre otros, predomina en Japón, Suecia y Portugal y en España en puntos como Islas Baleares y Huelva.