Esta campaña se realiza con el fin de prevenir y reducir los problemas derivados de las bajas temperaturas y sus efectos en la población, fundamentalmente personas mayores.
De este modo, se facilitan pautas muy sencillas, como salir a caminar aprovechando las horas centrales del día, asegurarse que el calzado es antideslizante y no olvidarse de las prendas de abrigo, beber líquidos calientes y azucarados, procurar permanecer en las estancias donde haya algún foco de calor o donde se pueda estar abrigado, y apagar las estufas eléctricas y de gas durante la noche.
Asimismo, en la campaña se desaconseja, si es posible, la utilización de braseros de carbón y que las estufas de carbón, eléctricas y de gas estén alejadas de visillos y cortinas, o de otros elementos inflamables.
Cruz Roja ha señalado que no sólo se proporciona información básica sobre cómo afrontar las bajas temperaturas evitando riesgos para la salud, sino también detectar posibles casos de malestar por esta causa y activar, en el caso de que sea necesario, a los servicios de emergencia.
Las llamadas, realizadas por voluntariado formado, se efectúan desde los Centros de Contacto de Cruz Roja en Burlada, Cascante, Cintruénigo, Lodosa, Pamplona, Sangüesa, Tafalla y Tudela.
Cada uno cuenta con una base de datos de estas personas en la que se almacena información sobre quienes requieren una especial atención por su situación de riesgo, enfermedad o vulnerabilidad.
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