Según el director del IAJ, Adrián Gimeno, las campañas de promoción y las reformas y mejoras llevadas a cabo en las instalaciones han propiciado que jóvenes de otras localidades aragonesas, de otras Comunidades o de otros países hayan elegido este albergue para pernoctar en Zaragoza.

Gimeno ha insistido en que esta legislatura se ha consolidado la tendencia alcista, tanto en número de usuarios como de pernoctaciones, aunque en 2017 parte de las instalaciones permanecieron cerradas en verano por las obras de mejora que se llevaron a cabo.

El número total de pernoctaciones que se contabilizaron en 2017 fue de 4.960 frente a las 3.925 de 2015, lo que supone un incremento de un 26,3 por ciento. La subida ha sido mucho mayor en el caso de los usuarios individuales: 821 frente a 166, lo que supone un incremento de un 394,5 por ciento.

En el caso de los grupos, el incremento también ha sido notable ya que en 2017 pasaron por el Baltasar Gracián 43 grupos frente a los 25 que lo hicieron en 2015. En cuanto a la procedencia de las personas que eligieron este albergue para alojarse, 718 eran aragoneses; 761, de otras Comunidades y 388 de otros países.

OBRAS

El Instituto Aragonés de la Juventud invirtió el pasado verano un total de 122.295,56 euros en obras de reforma de algunos espacios y en la renovación de equipamientos para que los jóvenes usuarios de la residencia y el albergue Baltasar Gracián tengan unas instalaciones más modernas y cómodas.

La actuación más importante tuvo lugar en el comedor del centro y en el 'office' que se encontraban bastante deteriorados, tanto en lo que se refiere a instalaciones como a mobiliario.

Se renovaron completamente los revestimientos, la instalación eléctrica, luminarias y altavoces, los muebles auxiliares y se sustituyeron las mesas y sillas. En el 'office' se intervino en la zona del tren de lavado de cocina y de reparto de menús para facilitar la tarea a los trabajadores.

También se instaló una red para evitar el movimiento de palomas en el patio interior del edificio e impedir la acumulación de palomina. Con esta actuación, se permite el uso de esta zona cuando el tiempo lo permite.

Otro de los puntos en los que se actuó es en la zona ajardinada de la entrada al edificio por la calle de Franco y López, que estaba muy deteriorada y llena de maleza. Se sustituyeron los arbustos y se plantaron nuevos árboles.

OTROS TRABAJOS

Las obras llegaron también a la entrada y recepción del Espacio joven Baltasar Gracián donde, además de renovar el mobiliario, se instaló un punto de CorreosPaq para facilitar a los usuarios el envío y recogida de paquetes mediante los dispositivos Home Paq y CityPaq.

En la zona del albergue, se acondicionó un espacio con cabinas que sirven de consigna, con cierre con moneda, para que los alberguistas puedan guardar maletas y objetos de valor. Además de estas reformas, se actualizó el sistema informático de gestión del albergue y se mejoró la red wifi con nuevas antenas para dar una mejor cobertura a los espacios de más difícil acceso.

Está previsto que este año se lleven a cabo nuevas actuaciones en diferentes zonas, tanto del albergue como de la residencia del Espacio Joven Baltasar Gracián, ha detallado el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.