La iniciativa ha partido del equipo que gestiona la red de centros sociales del Ayuntamiento de Oviedo. A lo largo de varias semanas, en los centros sociales se ha ido tejiendo esa red que se ha colocado en le Paseo de los Álamos. "Esta red es para recordar la diversidad funcional, una cuestión que nos afecta a todos puesto que no estamos libres de padecerla", ha señalado Ponga.

Las personas que han participado en la actividad son las que asiduamente acuden a los centros sociales para realizar actividades de ocio y tiempo libre.

"Oviedo tiene todavía mucho recorrido para llegar al objetivo ideal que es el de la accesibilidad universal y que toda la ciudadanía pueda acogerse a los recursos de la ciudad sin necesidad de intermediación", ha explicado Ponga.