La reforma de la plaza del Torico deja insatisfechos a los turolenses

  • La plaza ha permanecido cerrada durante más de un año de obras.
  • Los vecinos critican la falta de luz y los bordillos muy agudos.
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Iluminación mediante luminarias incrustadas en el pavimento de basalto importado de China en la plaza del Torico de Teruel.
Iluminación mediante luminarias incrustadas en el pavimento de basalto importado de China en la plaza del Torico de Teruel.
FRANCISCO MONTERO/EFE
Iluminación mediante luminarias incrustadas en el pavimento de basalto importado de China en la plaza del Torico de Teruel.

Numerosos turolenses ha acudido a la plaza del Torico para ver la nueva iluminación de esta plaza histórica tras permanecer cerrada durante más de un año de obras. Las opiniones fueron muy diversas pero en general no ha gustado demasiado la intervención en un espacio urbano de fuerte personalidad y muy consolidado en el imaginario popular.

La falta de luz en los porches y la molestia que supone entrar en una plaza con bordillos muy agudos que se confunden y provocan caídas son las principales quejas que se escucharon entre los vecinos de la ciudad. En este sentido, un arquitecto de la ciudad comentó que si bien el diseño es bueno no está pensado para los ciudadanos que son los usuarios de este espacio central de la ciudad.

Consideró que uno de los principales problemas es que se llega a la plaza desde calles bien iluminadas y al entrar en ella hay un descenso muy brusco de la intensidad lumínica. Esta noche se han encendido las luminarias de leds situadas en el pavimento de basalto negro importado de china así como otros que lanzan una luz desde arriba hacia abajo.

Todavía no están encendidas las luces de los porches ni tampoco las farolas, que darían más luz y calidez a este espacio urbano. La plaza, cuya actuación fue inaugurada hace un par de días, está todavía pendiente de ajustes ya que se ha adelantado la finalización de la obra para atender la petición de los comerciantes ante las fechas navideñas.

Esta actuación es obra del arquitecto Fermín Vázquez, director del estudio barcelonés b720 ARQUITECTOS , que ha colaborado en diversas obras con David Chipperfield o Jean Nouvelle, quien resultó ganador de un concurso internacional para este proyecto que ha costado más de seis millones de euros.

La plaza tiene una superficie de 1.798,76 metros cuadrados a los que hay que sumar otros 1.047 bajo los porches que la rodean. El nuevo pavimento es de basalto importado de China y el elemento visual más destacable de la actuación es un sistema de iluminación compuesto por 1.230 luminarias con lámparas leds incrustadas en el suelo en las que se puede cambiar el color, generar texturas y ritmos de luz.

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