Según ha explicado este viernes en un comunicado el Instituto Armado, a los detenidos se les acusa de ser los autores de numerosos delitos de robo y pertenencia a grupo criminal.

La investigación se inició tras detectar un aumento de denuncias por robos en viviendas y hoteles de la zona de Torrenova y Magaluf en el término municipal de Calvià.

Agentes de la Guardia Civil de dicha localidad se percataron que los robos seguían un patrón determinado y se cometían generalmente en horario de madrugada y especialmente en fin de semana.

Por ello, llevaron a cabo varias gestiones en las zonas de mayor incidencia de delitos, con las que se consiguió averiguar que los hechos delictivos eran cometidos por un grupo organizado compuesto por varios jóvenes.

El desarrollo de la operación se llevó a cabo durante el pasado mes de octubre, al principio se identificó y detuvo a tres de los miembros del grupo.

A continuación se detuvo a cuatro componentes más del grupo, entre los que se encontraba el cabecilla de la organización. Según ha asegurado la Guardia Civil, se trata de un individuo "muy agresivo y violento, que mediante amenazas y coacciones tenía amedrentado al resto de la banda".

Asimismo, a finales de octubre se localizó y detuvo a los dos últimos miembros de la organización, un hombre y una mujer.

El grupo desarticulado era "muy activo" y estaba "perfectamente organizado", donde cada miembro de la organización tendría sus funciones especificas, así algunos de los componentes serían los encargados de la comisión de los robos mientras otros realizaban funciones de vigilancia.