Ocho de cada diez matrimonios registrados en Euskadi durante 2016 fueron civiles, lo que representa un 81% del total de enlaces que se llevaron a cabo el año pasado y supone triplicar la cifra desde 1990.

El número total de matrimonios en el País Vasco ascendió el pasado año a 8.028 uniones, un 1,9% más que en 2015, de los que 180 fueron matrimonios homosexuales, un 23,3% más, según datos elaborados por Eustat. La tasa de nupcialidad vasca se sitúa en 3,4 bodas por mil habitantes, cifra inferior a la española (3,7%) y a la de la Unión Europea, que en 2011 -el último dato disponible- ascendía a 4,2%.

Respecto al estado civil previo al matrimonio, los hombres solteros representaron el 86,5%, la misma proporción que en el caso de las mujeres solteras, mientras que el verano es la época preferida por las parejas para casarse: concretamente julio se situó en primer lugar con 1.421 bodas, seguido por septiembre, con 1.232, y por junio, con 1.049.

Los lugares elegidos para fijar su residencia fuera de Euskadi por las 471 parejas que dejaron la comunidad autónoma tras contraer matrimonio fueron Madrid, Barcelona y Francia. Aparecen diferencias, en cuanto al destino, entre los matrimonios celebrados en los tres territorios.

Los de Álava se dirigieron preferentemente a Madrid, Barcelona y La Rioja; los de Bizkaia se trasladaron a Madrid, Cantabria y Barcelona; y los de Gipuzkoa a Francia, Madrid y Barcelona.

Asimismo, el número de matrimonios homosexuales creció un 23,3% en 2016, mientras que el de heterosexuales lo hizo un 1,5%. Así, el pasado año se celebraron 180 bodas entre personas del mismo sexo; 101 fueron entre mujeres y 79 entre hombres. En cuanto a su distribución territorial, 21 fijaron su residencia en Álava, 62 en Gipuzkoa, 87 en Bizkaia y 10 fuera de Euskadi.

En relación únicamente a los matrimonios de residentes en el País Vasco entre personas de diferente sexo, el número total fue de 7.848. Se celebraron 114 bodas más que el año anterior, lo que supone un incremento del 1,5%.

SE TRIPLICAN LAS BODAS CIVILES DESDE 1990

Asimismo se ha producido un aumento en la edad de matrimonio en paralelo al retraso de la maternidad. En 2016, la edad media de los hombres solteros que contrajeron matrimonio fue de 36,7 años y de 34,6 la de las mujeres solteras. En estos últimos 25 años, la edad media de los esposos ha aumentado en 7,6 años y en 7,7 en el caso de las esposas.

A lo largo de los últimos años se ha incrementado el número de bodas civiles, que han pasado de representar el 23% en 1990, a ser el 80,9% en 2016, año en el que ascendieron a 6.346 enlaces fuera de la Iglesia. Los matrimonios católicos fueron 1.491 y once correspondieron a otras confesiones religiosas.

Por territorios históricos, fue en Bizkaia donde las bodas civiles tuvieron mayor peso (84%), seguida por Gipuzkoa (81,3%) y Álava (79%). Sin embargo, en el caso de los residentes vascos que celebraron su boda fuera del País Vasco el porcentaje desciende hasta el 67%.

Por otra parte, el número de matrimonios celebrados en viernes se aproxima a los celebrados en sábado mientras que las bodas religiosas se producen en sábado, con una cifra que disminuye desde 1996. Así, en 2016, el 44% de las bodas se celebró en sábado y el 42% en viernes.

En cuanto a la nacionalidad de las personas contrayentes, en 1.213 matrimonios (el 15,5% del total) al menos uno de los cónyuges era extranjero. En el 44,6% de estos matrimonios era la esposa la que tenía nacionalidad extranjera, en el 26,5% el esposo y en el 28,9% restante ambos cónyuges eran extranjeros.

Los países de origen más habituales entre las recién casadas extranjeras fueron Colombia con 107, Bolivia con 81, Brasil con 68, Nicaragua con 61, Marruecos con 60 y Ecuador con 46. En cuanto a los nuevos esposos extranjeros, 83 procedían de Marruecos, 71 de Colombia, 49 de Bolivia, 33 de Ecuador, 31 de Portugal y 30 de Francia.