Los edificios con más de 40 años deberán pasar una inspección técnica, algo parecido a la ITV del coche, pero en lugar de comprobar los frenos, las luces y la dirección, los aparejadores y arquitectos revisarán los cimientos, el tejado y la estructura...

Estas revisiones son obligatorias por ley -Reglamento regional de Urbanismo (pdf.)- desde 2005, pero su control dependía del Ayuntamiento y hasta ahora no pedía a las comunidades los certificados de las inspecciones.

Sin embargo, a partir de enero todo va a cambiar. La Concejalía de Urbanismo pondrá en marcha una oficina para las inspecciones técnicas de edificios, con dos arquitectos, un aparejador y un administrativo. Desde allí se controlará que todos los bloques cumplen con la normativa y revisarán los informes.

Lo anunció ayer la concejala del área, Cristina Vidal, durante la presentación de su presupuesto.

Precios libres

Los encargados de hacerlo serán los aparejadores y los arquitectos, que examinarán el bloque, con especial las estructuras, el tejado, las fachadas y los elementos susceptibles de desprenderse. Los precios son libres y dependen de las características de cada inmueble.

Por ejemplo, una inspección para un bloque de cuatro pisos más el bajo, con cuatro viviendas por planta, con cimientos de hormigón, el precio podría rondar los 700 euros. Si la estructura es de madera o piedra; o si son muy antiguos, es más caro.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) , en Valladolid hay más de 8.622 bloques de viviendas que tienen 40 años o más (con 62.555 pisos). A ellos hay que sumar las fábricas, almacenes... Por lo que podrían superar los 12.000.

Dentro del presupuesto de Urbanismo también hay una partida de 500.000 euros para ayudar a rehabilitar los pisos que lo necesiten.

Además destinará 2,7 millones a las ayudas del ARI de La Rondilla y dentro del Casco Histórico arreglarán bloques en Platerías y Santo Domingo de Guzmán.