El ecuador de la legislatura está marcado por la designación de la capital aragonesa como sede de la Expo 2008 y el impulso a las viviendas de protección oficial (3.200 en dos años). En el lado negativo figuran el deterioro del tráfico y el transporte público, la escasez de aparcamientos, el ruido y la presión fiscal, que ha alcanzado altos niveles, con tres delegados de área distintos. Restan dos años para comprobar si el Metro, la limpieza de las riberas y el desarrollo de los suelos de la Intermodal salen adelante.
Balance de dos años de gobierno municipal
Promesas pendientes
Movilidad: No se ha puesto en marcha ningún kilómetro de carril-bici nuevo ni calles con velocidad limitada a 30 km/hora ni calles peatonales. Las frecuencias de los autobuses están rotas y las esperas son cada vez más largas. Además, los carriles-bus con bordillo no han funcionado. El metro-tranvía ligero sigue a la espera de los estudios que avalen su puesta en marcha.
Aparcamientos: Los coches siguen durmiendo en doble fila en los distritos y aparcar en el centro sigue siendo difícil. El plan para construir aparcamientos en Torrero, camino de las Torres, plaza Reina Sofía, Sweitzer, Las Fuentes y Actur continúa estancado.
Impuestos: Nada recogían las bases del Gobierno PSOE-CHA sobre los tributos municipales. Quizá por eso se han disparado en los dos últimos años. El impuesto sobre bienes inmuebles ha subido más de un 32% desde 2003; el agua, el 18%; la tasa de recogida de basuras, el 23%, y el billete sencillo de autobús cuesta 0,10 euros más caro (0,75 euros).
Inspección técnica de edificios: Va muy lenta, a pesar de que tienen que superar el examen 600 inmuebles de San Pablo y La Magdalena este año.
El fin del ‘ballet’: El pacto PSOE-CHA recogía «difundir el Ballet de Zaragoza», pero este año desaparecerá.
Venta de suelo público: Enajenaron suelo en Arcosur para comprar el meandro de Ranillas, rehabilitarán el Seminario con pisos libres e incrementarán las viviendas en el Portillo y la Intermodal para pagar el tranvía y una línea de cercanías.
Mucho ruido: El conflicto entre los vecinos y los bares se mantiene, Interpeñas volverá a Miguel Servet (será el último año), los aviones molestan en Valdefierro y Montecanal y las pantallas acústicas no llegan al Rabal y San José.
Promesas cumplidas
Expo 2008: Zaragoza organizará la Exposición Universal de 2008. El Estado financiará el 70% del coste de la Expo, y el Ayuntamiento y la DGA el 30% restante, a partes iguales. El meandro acogerá, además, un parque que tendrá 115 hectáreas.
Transbordos en el bus: Desde el 7 de febrero, los zaragozanos pueden cambiar de autobús durante una hora pagando un solo viaje.
Control del tráfico: La Policía aumentó un 80% los controles de alcohol y de velocidad e intensificó la vigilancia en los semáforos y del uso del cinturón. Logró reducir los accidentes, aunque este año han repuntado de nuevo (nueve muertos en la ciudad).
Traslado de fábricas: Aceralia y Filtros Mann abandonarán el Rabal, y la factoría de ascensores Schlinder, Las Fuentes.
Reciclaje: El Centro de Reciclaje de La Cartuja estará listo en otoño de 2006 y acogerá 4,6 millones de toneladas de basura en los próximos 15 años.
Presupuestos participativos: En la mayoría de los barrios son los vecinos los que deciden en qué gastar el dinero de la junta de distrito. En el Rabal, las decisiones se adoptarán votando por Internet.
La Romareda: El nuevo campo se construirá donde está, sin pelotazo urbanístico. El Real Zaragoza explotará el espacio deportivo y el comercial.
Vivienda protegida: El Ayuntamiento impulsó 1.700 viviendas protegidas en 2004 y este año espera llegar a las 1.500. La construcción de VPO en Valdespartera arrancó el pasado 29 de abril.
Z-ciudad: Participación Ciudadana ha aumentado la oferta lúdica en los barrios con la apertura de los centros cívicos los fines de semana.
Vuelos baratos: Ryanair oferta conexiones diarias con Milán y Londres.
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