El equipo de Gobierno, que cuenta en principio con el respaldo de IU y de CHA (el PP mostró su rechazo), quiere modificar la ordenanza de taxis tres meses antes de la celebración de la Expo. Hasta entonces no se incrementarán las tarifas.

La propuesta municipal va en la línea de lo acordado con los representantes de los taxistas, que luego éstos rechazaron en asamblea. Ese acuerdo preveía poner en servicio en la calle unos 400 taxis más, 50 mediante nuevas licencias que revertirían al Ayuntamiento tras la jubilación de sus titulares, 171 por una mejor organización de la flota y otro 10% con la contratación de chóferes.

La propuesta del equipo de Gobierno municipal prevé también la incorporación a todos los taxis de un sistema de GPS con una terminal en los servicios municipales y otra a disposición de los taxistas, con el objetivo de garantizar la seguridad y de controlar que se presta un servicio eficaz.

También se contempla en el plan municipal una subida de tarifas de acuerdo con el IPC del transporte, así como establecer el plus de la Estación Intermodal en 1,5 euros. Además, se considerarían los sábados por la mañana como festivos.

Amenazan con paros

El presidente de la Asociación Provincial del Taxi, Luis Miguel de Torres, volvió a expresar el rechazo del gremio a la propuesta municipal y amenazó con oponerse con paros coincidentes con los que en los próximos días desarrollarán los conductores de Tuzsa. Los taxistas, que no quieren más licencias ni llevar GPS, amenazan también con que a partir del sábado trasladarán viajeros a la estación de Delicias, pero no recogerán los que lleguen allí en tren o en bus.