Un niño de once años de edad tuvo que ser rescatado tras quedar atrapado entre unos bloques de hormigón a los que cayó desde el espigón de Bermeo (Bizkaoa), a la altura del faro.

Según ha informado a Europa Press el Departamento de Seguridad, el suceso se produjo alrededor de las nueve de la noche del lunes. La Ertzaintza recibió a esa hora el aviso de que un niño se había caído desde la zona del faro, en el espigón de la localidad vizcaína.

La Unidad de Rescate de la Ertzaintza y los bomberos lograron sacar alrededor de las diez y media de la noche al pequeño, que había caído en un estrecho espacio, a varios metros de profundidad, entre dos bloques de hormigón.

Aunque, en principio, el niño parecía encontrarse en buen estado, fue evacuado al Hospital de Gernika, donde se le practicó un reconocimiento médico.