Así, en un comunicado, los populares informan que la concejal del PP representante del distrito Zaidín, Inmaculada Puche, ha presentado varias iniciativas al pleno municipal alertando sobre el "peligro" y los problemas que genera para el barrio que las viviendas de Santa Adela aún no hayan sido demolidas.

En este sentido se ha pronunciado el portavoz adjunto del grupo municipal del PP, Antonio Granados, quien ha visitado la zona y ha podido comprobar de primera mano el problema de inseguridad que presenta el barrio. "Se han arrancado ventanas y hay okupas en algunas viviendas, en las puertas de los bloques se están acumulando descontrolada residuos, cascajos y botellas de vidrio vacías", ha relatado Granados.

El dirigente del PP ha explicado que esto se produce propiciado por el "estado de abandono" del barrio de Santa Adela por parte del gobierno de Cuenca, donde los bomberos han tenido que intervenir en dos ocasiones por la "falta de inspección y mantenimiento municipal".

De esta manera, Granados ha recordado que la remodelación del barrio de Santa Adela era un proyecto iniciado por el gobierno municipal del PP y que el alcalde de Granada, Francisco Cuenca (PSOE), cuando llegó a la Alcaldía, "solo tenía que finalizar".

Sin embargo, ha apuntado que pese a que el Gobierno central "hizo sus deberes" y abonó la aportación que le correspondía de más de cuatro millones de euros, el PSOE en la capital "consintió" que la Junta de Andalucía tardase más de seis meses en firmar el convenio con el Ayuntamiento de Granada, "debido a que estaban más centrados en los problemas de Susana Díaz y Pedro Sánchez, anteponiendo los intereses del PSOE a los de los vecinos de Santa Adela y el Zaidín".

"Solo quedaba ejecutar la finalización del proyecto, pero Francisco Cuenca olvida a los granadinos al no saber gestionar la ejecución y terminación de un proyecto", ha reiterado Granados, quien ha recordado que la cesión de las viviendas por parte de los vecinos se realizó entre abril y junio de 2016, y era en agosto de ese mismo años cuando debería haber comenzado la demolición.

Por otra parte, ha indicado que "el de Santa Adela es un ejemplo más de que el área de Urbanismo, Mantenimiento y Medio Ambiente está paralizado, con el consiguiente desprecio a los afectados y beneficiados de Santa Adela".

No obstante, el grupo popular ha pedido una reunión urgente con las administraciones implicadas para acordar la ampliación del cronograma de ejecución de una manera "realista" y garantizando que se cumplan las etapas y los plazos.

Por su parte, el presidente de la Asociación de comerciantes y autónomos distrito Zaidín-Vergeles y Campus de la Salud, Francisco Prados, ha alertado de que la situación de insalubridad que presenta el barrio de Santa Adela en los últimos meses ha dado lugar a que los roedores y las cucarachas "campen a sus anchas". "Todo viene del estado de abandono y deterioro que presentan los pisos de Santa Adela, cerrados y sin agua potable desde hace medio año", ha asegurado Prados.

Asimismo, como presidente de los comerciantes del distrito, ha lamentado el "daño irreparable" que el retraso de las obras está produciendo en la zona comercial del entorno del barrio de Santa Adela, después de que un 90 por ciento de las familias que vivían en los pisos que han sido expropiados hayan sido reubicados en otras zonas de la ciudad y, por tanto, ya no inviertan en el pequeño comercio del Zaidín.

De su lado, Prados ha confirmado que, en los últimos seis meses, dos locales comerciales "han tenido que echar el cierre por la merma en las ventas" y otros tantos "están a punto de cerrar también". "A la gente que se ha marchado se suma que nadie quiere irse a vivir a Santa Adela porque, por la dejadez del Ayuntamiento de Granada, se está convirtiendo en una zona marginal que espanta a cualquier interesado en fijar allí su lugar de residencia o montar un negocio", ha criticado.

Por último, se ha preguntado "cuánto no lleva el gobierno de Cuenca invertido en alquileres sociales para los vecinos de Santa Adela reubicados". "Si las obras llevan casi seis meses de retraso, a una media de 300 euros de alquiler mensual por familia, ¿cuánto destina el Ayuntamiento de las maltrechas arcas municipales en lugar de reclamar, cada día, que las obras empiecen ya?", ha incidido Prados.