El marinero Corto Maltés, uno de los personajes más emblemáticos del noveno arte, cumple 40 años. Creado por el italiano Hugo Pratt, Corto está inspirado en los personajes de la literatura romántica. Es un aventurero incansable, amante de la libertad y amigo de sus amigos, y siempre está dispuesto a viajar por el mundo, de las fría estepa siberiana a las callejuelas de Buenos Aires.

Durante sus periplos, Corto conoció a Stalin, visitó la Italia que se dirigía al fascismo, buscó las minas del rey Salomón y el continente perdido de Mu, e incluso se alistó para participar en la guerra civil española. Combatió en el bando republicano y desapareció en combate aunque no murió, según asegura su propio autor.

Pratt creó a Corto Maltés en su mejor momento como dibujante y narrador. Después, le convirtió en mito contemporáneo. Lo logró hasta tal punto que algunos lectores han llegado a creer que este marinero flemático y aventurero, humanista y culto, existió realmente.

En la gran pantalla

A lo largo del año, para conmemorar el aniversario, las librerías y salas de arte de toda España han acogido exposiciones y celebrado actividades relacionadas con el personaje. Además, el pasado mes de febrero se estrenó Corto Maltés. La película, un largometraje de animación inspirado en el cómic Corto Maltés en Siberia.

Norma Editorial planea lanzar una edición especial del primer volumen de Corto Maltés, La balada del mar salado, publicado en 1967. Esta edición contará con un prólogo y un epílogo especiales, además de páginas con ilustraciones inéditas.

El Corto nos da la hora

Además de los productos que ya se venden del personaje (tazas, camisetas o la serie en DVD), la relojera Swatch ha rendido homenaje a Corto Maltés con la presentación de dos relojes con ilustraciones de Hugo Pratt. En el primero, Corto está con la chaqueta y gorra de capitán de la marina mercante. El segundo es una edición limitada a 11.111 unidades e incluye una brújula y un mapa del mundo.

Hugo pratt

El cómic por bandera. Nacido en Rímini (Italia) en 1927, muy pronto se enamoró de la literatura y los cómics de aventuras. Vivió en Etiopía hasta 1943, y tres años después debutó en el mundo de la historieta con el justiciero As de Pique. En 1949 se fue a Argentina y creó series en las que maduró su estilo. Falleció en 1995, pero su obra todavía sigue viva.