El hombre detenido en Gijón como presunto autor de la muerte violenta de Jesús Martínez Pérez, de 68 años, ocurrida el pasado miércoles en Osorno (Palencia), ha ingresado hoy en el Centro Penitenciario de La Moraleja, en Dueñas.

Fuentes de la Guardia Civil han informado de que el detenido, L.J.C.L., de 36 años, que se encontraba arrestado en la comandancia de la Guardia Civil de Palencia, ha ingresado en prisión tras prestar declaración esta mañana ante el juez de Carrión de los Condes.

Investigación de los hechos

Jesús Martínez Pérez fue hallado muerto en su domicilio, con lesiones en el cuello y heridas de arma blanca por el cuerpo, tras lo que las Fuerzas de Seguridad barajaron el robo, en principio, como posible móvil del crimen, un caso sobre el que el juez ha decretado secreto sumarial.

Las investigaciones se iniciaron el pasado 14 de noviembre, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de que una vivienda de la localidad de Osorno (Palencia), tenía apariencias externas de haber sido objeto de un robo, según dijo a los agentes uno de los hermanos del morador de la vivienda, precisaron tras el suceso fuentes policiales.

Posteriormente, se desplazó al lugar de los hechos una patrulla de la Guardia Civil y comprobó que los enseres de la vivienda se encontraban muy desordenados y en el interior de una habitación se hallaba el cadáver de una persona.

Fuentes familiares indicaron que la víctima tenía el cuello roto y un fuerte golpe en la nuca, y el subdelegado del Gobierno, Raúl Ruiz Cortés, apuntó ante los medios de comunicación que el cadáver presentaba diferentes cortes producidos por arma blanca en cara y rodillas, aunque éstas no eran mortales.

Su cuerpo tenía evidentes síntomas de muerte violenta y fue identificado como Jesús Martínez Pérez, de 68 años, propietario de la casa en la que fue hallado sin vida. Vivía solo y era conocido en el pueblo que podía tener en su casa una elevada cantidad de dinero después de haber obtenido hace dos años la jubilación en una empresa de fundición situada en Maliaño (Cantabria).

Las investigaciones dieron como resultado que el posible autor podría encontrarse en las provincias de Palencia, Burgos, Santander o Asturias. A continuación, la Guardia Civil supo a través de las pesquisas practicadas que se encontraba en Gijón, a donde se dirigieron varios agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Palencia para practicar su detención.

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