En rueda de prensa, la diputada nacionalista Montse Prado ha incidido en que la reorganización del mapa sanitario gallego "provocará más deterioro en la sanidad pública" al priorizar "el criterio económico en detrimento den las necesidades de los usuarios".

Por otro lado, han criticado que esta reforma "aleja la sanidad de la sociedad" y constituye "un instrumento más para los recortes, la concentración y la toma de decisiones".

Asimismo, ha hecho referencia a "las formas" en las que este anteproyecto se ha presentado. "No es de recibo que en pleno mes de agosto, con muchos profesionales de vacaciones, se presente esta modificación", ha criticado Prado, al tiempo que ha denunciado la "total opacidad y falta de consulta pública" con la que se ha llevado a cabo la elaboración de esta medida.

11 ÁREAS, 7 EOXIS Y 14 HOSPITALES

En concreto, el anteproyecto de esta ley reorganizará un mapa sanitario que actualmente se distribuye en 11 áreas, en siete Estruturas Organizativas de Xestión Integrada (EOXI) y 14 hospitales.

Así, la nueva ley modifica esta distribución y convierte a las siete EOXIS existentes en las áreas sanitarias. Del mismo modo se crean 14 distritos que, según ha indicado Sanidade, "deben contar con un hospital de referencia en su ámbito geográfico".

CONSECUENCIAS

En este sentido, los nacionalistas han dicho estar "delante de una modificación que lo que hace es alejar aún más la sanidad de la población". Además, consideran que "estas modificaciones son un instrumento más para los recortes, la concentración, la toma de decisiones y la exclusión de la población del control de la sanidad".

A su juicio, este anteproyecto, de convertirse en ley, "sólo provocará más deterioro de la Atención Primaria y de los hospitales comarcales, que perderán autonomía".

Además, han hecho hincapié en el hecho de que "la anterior ley establecía que la prestación de servicios se haría siempre teniendo en cuenta las necesidades de la población", y que ahora "se harán teniendo en cuenta los recursos existentes".

CONSELLOS DE SAÚDE

Otra de las líneas que recoge esta ley y que ha sido criticada por los nacionalistas ha sido la "participación ciudadana en la toma de decisiones y control del sistema sanitario" a través de los Consellos de Saúde.

Así pues, en palabras de Prado, "la nueva organización retira las funciones de asesoramiento y consultivas del Consello", cuya conformación será realizada "por decreto por la propia Xunta". Por ello, ha denunciado que, a través de esta reforma, "la ciudadanía tendrá menos capacidad para poder conocer, opinar, evaluar y emitir informes a respecto de la sanidad pública gallega".

"Feijoo habla de transparencia y participación, pero a la hora de la verdad, no se concreta", ha apostillado la nacionalista, al tiempo que ha calificado de "palabrería barata" lo estipulado por Sanidade.

"RETIRADA DEL ANTEPROYECTO"

Así pues, el BNG ha avanzado que "demandará la retirada de este anteproyecto" y solicitará que se mantengan las áreas sanitarias establecidas en la Ley de Salud de Galicia. Además, pide la "puesta en valor de los hospitales comarcales", con una "mayor dirección y capacidad para toar decisiones".

En este sentido, ha defendido que la "Atención Primara es fundamental como puerta de entrada al sistema sanitario", algo que se ve afectado con "todas las decisiones que el PP ha ido tomando desde el 2009". Y es que, según ha defendido Prado, "la Atención Primaria es la que ha sufrido con más insistencia los recortes sanitarios", que han sido "superiores al 20 por ciento".

Por otro lado, los nacionalistas demandarán "el mantenimiento de los Consellos de Saúde tal y como vienen recogidos en la ley vigente", ya que "la situación de deterioro que sufre la sanidad pública obliga a revitalizar estos Consellos". De esta forma, según han indicado, la "ciudadanía podrá testar y evaluar lo que se está haciendo en sanidad".