Tras las críticas vecinales y de comerciantes al sistema de recogida de basura en el centro histórico de Málaga, el Ayuntamiento inició ayer la instalación de contenedores para basura industrial en la calle Bolsa. En este lugar había cuatro bidones soterrados: dos para basura orgánica, uno para papel y otro para envases.

En los dos últimos recipientes, los buzones que quedan en la superficie han sido cambiados por otros con la compuerta más grande. Se destinarán sólo a los desechos de bares y restaurantes. Los establecimientos abrirán la tapadera gracias a una llave, que deberán retirar al cerrar el buzón. Los envases, al quedar sin contenedor, se echarán en el de basura orgánica y se separarán en una planta.

Papel y cartón se recogerán puerta a puerta de 13.00 a 14.00 h. Con esto se quiere evitar que queden bolsas de basura en las calles. Si el sistema funciona durante las próximas dos semanas, el Ayuntamiento instalará nuevos buzones en la plaza del Carbón. Después se ampliarían los otros seis conjuntos de contenedores soterrados.

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