«Los viernes es cuando más trabajo se acumula. La gente viene con prisas porque al día siguiente no abrimos y a veces tengo que celebrar las bodas a toda velocidad», explica.

Este cambio empezará a aplicarse a partir del 1 de enero de 2008 y las bodas que se piden ya se fijan para los jueves.

Esta decisión afectará a cerca de 300 parejas, que son las que cada año, de media,  acuden al juzgado para contraer matrimonio (el año pasado 313 parejas), según el Registro Civil.

Más trabajo al alcalde

Además, puede repercutir en el número de ceremonias que al final haya en el Ayuntamiento, el otro sitio donde se pueden celebrar bodas civiles en la capital. En el Consistorio los días en los que el alcalde casa (o algún concejal si delega) son los viernes o el último sábado de cada mes. Allí contrajeron matrimonio 125 parejas en 2006 (148 en lo que va de  año).

El tiempo que hay que esperar en el Ayuntamiento es de un mes y medio, los que quieren casarse los viernes, y algo más de dos meses para los sábados, según fuentes municipales.

Organizan bodas desde hace 8 años

Ana Gómez responsable de abalbodas

«Nunca hemos tenido una boda en jueves»

«Creo que va a complicar mucho la vida a las parejas que se casen. Yo en ocho años nunca he tenido que organizar ninguna boda los jueves, pero si los viernes ya es muy complicado para los invitados, imagínate... Yo creo que la gente acabará casándose en otros pueblos o en el Ayuntamiento. A los restaurantes y fotógrafos les viene hasta bien, pero no a los que se casan. Ahora las bodas civiles tienen tantos invitados como las religiosas».