Miles de personas se concentraron este domingo en la plaza Mayor de Salamanca -14.000 según la Policía Local y 50.000 según los organizadores- para protestar por la subida de tasas e impuestos municipales propuesta por el Consistorio salmantino.

Si las medidas planteadas por el alcalde de Salamanca, Julián Lanzarote, se aprueban definitivamente la contribución subiría una media de 45 euros, la basura 17 euros y el agua un 14%, mientras que el bonobús sufriría un incremento del 85%.

El portavoz municipal del Grupo socialista, Fernando Pablos, se mostró muy "satisfecho" por la cantidad de gente que secundó esta concentración, convocada por la Federación de Vecinos, y aseveró que "nunca en la historia de Salamanca hubo una movilización ciudadana tan grande contra la gestión de un alcalde"."Este clamor tiene que tener una respuesta que solo puede ser rectificar o dimitir", aseveró Pablos quien precisó que esta "es la tarea que debe hacer hoy el alcalde, escuchar a los salmantinos".

Críticos con el alcalde

Por su parte, el presidente de la Federación de Vecinos, José María Collados, se mostró muy critico con la gestión de Lanzarote y le pidió que de marcha atrás porque, en su opinión "no puede seguir sin escuchar a los vecinos e intentar llevarse por delante el sistema democrático".

En su intervención Collados aprovechó para acusar al alcalde de la ciudad de haber perdonado dinero a diversos constructores "amigos" y aseveró, al respecto, que los impuestos "son necesarios pero no para pagar las deudas de la mala gestión de este Ayuntamiento gobernado por Lanzarote" a lo que añadió que todos tienen que aportar "y no sólo los que usan el autobús".

La concentración estuvo apoyada por el sindicato UGT cuyo secretario provincial, Agustín Rodríguez, afirmó que "la economía de los ciudadanos de Salamanca no esta para el exabrupto que Lanzarote ha hecho".