La modificación ha salido adelante con los votos a favor del equipo de Gobierno local del Partido Popular y la Agrupación Municipal Socialista, mientras que ha contado con el voto en contra de los grupos municipales de Ciudadanos e Imagina Burgos y las abstenciones de los concejales no adscritos Fernando Gómez y Silvia Álvarez de Eulte.

El concejal de Hacienda, Salvador de Foronda, ha confiado en que el Gobierno autonómico remita al Ayuntamiento "en seguida" su pronunciamiento sobre el Plan Económico Financiero para poder acometer esta modificación, a la vez que ha recordado que el objetivo principal del documento es la amortización de la deuda municipal.

El edil socialista Antonio Fernández Santos, por su parte, ha defendido la legalidad de la modificación presupuestaria aprobada, que evitará la solicitud de un crédito para la ejecución de inversiones y permitirá elevar el presupuesto general de esta partida hasta los 40,5 millones de euros.

Pese a mostrar "poca confianza" en el Partido Popular, el concejal del PSOE ha destacado la importancia de "dar un empujón" a la inversiones para, entre otras cuestiones, materializar el acuerdo de su formación con el PP en este sentido.

La más crítica con la modificación presupuestaria ha sido la portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos, Gloria Bañeres, quién ha puesto en duda la legalidad de la aprobación por su carácter condicionante a un documento que aún no existe. "Es algo ilegal", ha añadido.

Por su parte, el portavoz del Grupo Municipal de Imagina Burgos, Raúl Salinero, ha condenado la "gestión del caos" del Gobierno Municipal que ha abocado al Ayuntamiento al Plan Económico Financiero. "Existe un vais administrativo que imposibilita hacer cualquier tramitación en tiempo y forma", ha puntualizado.