En declaraciones a Europa Press, Barba ha lamentado que "en la zona de Cuesta Maneli la imagen es desgarradora, pero a dos kilómetros, en la zona de Matalascañas la imagen es normal, y lo que ahora mismo buscan los clientes es el turismo de sol y playa y no tanto de naturaleza".
No obstante, aunque el sector mantendrá una reunión el próximo jueves para evaluar los daños, ha señalado que desde primera hora del lunes, acompañado por el gerente del Patronato de Turismo, Jordi Martí, visitaron los establecimientos afectados y el camping Doñana es el que más lo está, ya que finalmente en el Parador de Mazagón "fueron mínimos" y se prevé que a partir de este miércoles funcione con normalidad.
"En el camping los daños han sido más elevados, los extremos pegados a la playa y la recepción están destrozados, excepto una parte del medio que no está afectada", ha señalado Barba, quien ha precisado que en Matalascañas, a excepción del colapso producido el pasado domingo por el cierre de carreteras, "ahora mismo la situación es de total normalidad".
A su vez, ha manifestado que en Mazagón, por la parte de occidente, "tampoco hay problemas, más allá de las molestias visuales del espacio degradado, o el polvo y el olor", cuestiones estas últimas que se solucionarán pronto.
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