El ministerio público ha pedido un total de dos años de prisión para dos hombres, cuyas iniciales son C.A.M. y F.T.J., acusados de pescar peces mediante el vertido de lejía al río Torío en la localidad de Robledo de Torío, cerca de la capital leonesa, donde causaron la muerte de al menos 2.799 ejemplares.

El fiscal les acusa de ser supuestos autores de un delito relativo a la protección de la fauna, por el que solicita un año de prisión para cada uno, además del pago de una indemnización a la Junta de Castilla y León de 6.152 euros, cantidad en la que ha valorado los peces muertos, según las calificaciones provisionales de la Fiscalía.

Numerosas especies afectadas

Según la versión del ministerio público, los hechos se remontan al 26 de agosto de 2006, cuando los dos supuestos autores, en compañía de un tercero menor de edad, fueron al río, a la altura de Robledo del Torio, y pescaron mediante el vertido de lejía.

Esta actuación causó la muerte de al menos 2.799 ejemplares entre bermejuelas, bogas, barbos, gobios y otros peces, todos ellos valorados en 6.152,19 euros.

El fiscal también pide para los acusados la inhabilitación para el ejercicio del derecho a pescar durante dos años.

La vista se celebrará mañana en el Juzgado de lo Penal número 1 de León.

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