No perderán sus puestos de trabajo. Al menos eso es lo que ayer tarde les prometió el presidente de Ceuta, Juan Vivas, a pesar de que una auditora considera que en la empresa municipal de aguas, Acemsa , existe un exceso de plantilla cifrado en un 34%.

A pesar de lo dicho por la consultora Deloitte , que ha sido contratada expresamente por el Gobierno para analizar qué pasa en Acemsa, no habrá despidos pero tampoco contrataciones. Así, cuando vayan surgiendo huecos no se ofertarán plazas y los empleados que vayan quedando deberán hacer más labores.

No es que el Gobierno esté llamando vagos a quienes controlan la citada empresa, pero sí se cierra en banda a estirar más una plantilla que Deloitte considera excesiva. Pero hay más. La misma Deloitte considera que existe un grado de absentismo laboral que deberá ser más controlado.

Con la promesa de no despidos y no privatización, la Ciudad cierra una de las problemáticas sociales a la que se enfrentaba desde hacía semanas, prometiendo a los trabajadores que conocerán la forma en que se desarrollará el plan de empresa en el que ellos mismos están llamados a participar.

Acemsa es la sociedad bajo control municipal que más dinero gestiona en Ceuta y de hecho es considerada la 'joya de la corona'. Se había denunciado que la intención del Gobierno era venderla para obtener una inyección económica con la que pagar las obras del centro. Con la decisión del Gobierno, se cierra, de momento, la polémica.

El comité de empresa ha anunciado que suspende las manifestaciones previstas y toma la palabra del presidente popular, Juan Vivas, aceptando participar en la adopción de medidas que conlleven un mayor control financiero.

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