Una docena de estudiantes de la Universitat ha decidido apostar por la solidaridad. Han constituido el colectivo Estudiants sense Fronteres que, a semejanza de su gemelo francés, traerá gratis a estudiantes de zonas en conflicto para que vuelvan a sus países con formación superior. Pero no son guerras al uso, se trata de conflictos olvidados por el primer mundo, y ellos quieren que la memoria trabaje.

¿Por qué han iniciado este proyecto?

Queremos que estudiantes de países en conflicto vengan aquí a estudiar tres años, para que vuelvan a su país con una buena formación, no para fomentar una fuga de cerebros. En Francia ya hay casi 30 chechenos, y la intención es imitarles.

¿Cuántos integrantes son?

Somos unas once personas de varias nacionalidades, aunque la mayoría somos valencianos, y nos constituimos en abril.

¿Qué objetivo se marcan?

Traer lo antes posible a uno o dos estudiantes, pero antes necesitamos financiación. De momento, hemos hecho ciclos de conferencias, y pretendemos crear debate e informar sobre estos conflictos olvidados. Cualquier persona puede unirse o colaborar en esta dirección de correo electrónico.

¿Se implican los alumnos?

Existe un interés potencial, pero hay que dar un impulso porque cuesta movilizar a la gente. Es aberrante que en la sociedad de la información no conozcamos qué pasa en Darfur o Chechenia. Lo que más cerca nos toca, como españoles, es el Sahara.

BIO Álvaro La Parra nació en Gandia hace 23 años, y en la actualidad estudia un Máster en Economía en la Universitat.