La noticia la hizo ayer pública en Nueva York un portavoz de su marido, el actor y productor Mel Brooks.

Bancroft nació en el Bronx neoyorquino en 1931. Hija de inmigrantes italianos, en medio siglo de dedicación a la actuación consiguió un Oscar por su papel en El milagro de Ana Sullivan (1962). Este título fue la adaptación al cine de la obra de teatro homónima con la que Bancroft triunfó en Broadway, y en la que educaba a una niña ciega y sordomuda.

En 1980, Bancroft dirigió su primera película, Fatso,  con guión propio y trabajó a las órdenes de David Lynch en El hombre elefante.

Su interpretación en El graduado ha legado para la posteridad el sueño erótico de toda una generación. Simbolizada en la escena en la que la señora Robinson y Benjamin (Dustin Hoffman) viven una tórrida historia de amor en una habitación de hotel. La película refleja con humor una juventud perdida y a una madurez desencantada.

La pierna más famosa del cine

Anne Bancroft fue la tercera actriz a la que llamaron y la que se quedó con el papel para interpretar a la señora Robinson. Doris Day recibió antes la oferta, pero la rechazó. Ha habido más señoras Robinson. Kathleen Turner lo fue en el teatro (en 2000 en Londres y en 2002 en Broadway). Jerry Hall siguió los pasos de Turner en las tablas. Y Ángela Molina hizo lo propio en Madrid.

El himno de Simon  y Garfunkel

Simon & Garfunkel aportan a las escenas clave de El graduado el clásico hit Mrs Robinson. El pegadizo estribillo decía: «Y esto te lo digo a ti, señora Robinson/Jesús te ama más de lo que tú te crees (wo wo wo)».

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