Dulces, disfraces, velas, copas o calabazas. Esta noche, es la víspera de Todos los Santos pero no todo el mundo la celebrará igual. Y Jaén, una ciudad donde, hasta hace poco se ha respetado la tradición por parte de sus gentes, empieza a dar muestras de cierto coqueteo con la cultura importada de América. ¿Qué celebran: Noche de Todos los Santos o Halloween?

Prudencia, Mª José y Alicia, pertenecen a tres generaciones diferentes que reflejan la evolución en la celebración de este día. Unos cambios que se pueden deducir no sólo en la forma de festejar la víspera del 31 de octubre al 1 de noviembre, sino también en el contenido, es decir en el significado de la fiesta.

La tradición católica

Prudencia, de 50 años y ama de casa, asegura que hoy en día no celebra esta noche de ninguna manera especial: "Quizá compre dulces típicos, como buñuelos o huesos de santo, de todas maneras el sentido que tiene hoy esta celebración no tiene nada que ver con el que se vivía hace unos años", explica.

Prudencia recuerda que de niña se hacían dulces como las gachas y se asaban batatas o castañas y se comían para esa noche. "Era parecido a la Nochebuena", añade.

El sentido de esta festividad católica en España se ha asociado al recuerdo de los difuntos. Una noche en la que se venera a todos los santos que no tienen una fiesta propia en el calendario litúrgico.

"Recuerdo que era una víspera de recogimiento, de estar con la familia. Se rezaba por nuestros muertos y encendíamos velas por ellos. Al día siguiente íbamos al cementerio para arreglar los nichos de los familiares", explica Prudencia, la cual insiste que aun se practican estas tradiciones aunque reconoce que poco a poco se va perdiendo el sentido propio.

Etapa de transición

Para Mª José, estudiante de 22 años, esta fiesta es una mezcla de celebraciones que no le provoca ningún sentimiento más allá de la propia celebración "como un fin de semana más". "Para mí es un día de salida más, donde nos tomamos copas y bailamos", asegura la universitaria.

Pero esa noche muchos pubs y discotecas se disfrazan y organizan fiestas de disfraces, invitando a los jóvenes a juegos. "Está claro que la importación de Halloween está calando cada vez con más fuerza en Jaén. De todas formas no llega a los niveles de otras ciudades, donde sí he visto una celebración más americana", insiste Mª José.

La joven recuerda no celebrar este día como una fiesta de diversión "Más bien era para estar con la familia y recordar a los difuntos -explica-. Pero en realidad me indigna este cambio, ya que demuestra la falta de conservación de nuestras tradiciones y costumbres, mientras recuperamos e importamos todo lo que huela a americano, como Papa Noel en la Navidad"

Entre calabazas y disfraces

Alicia, de 14 y estudiante, vive la noche de otra manera, donde el terror y lo siniestro da pie a la fiesta. Para su generación, lo esencial es pasárselo bien disfrazándose, contando historias de miedo y viendo películas de terror. "Esta noche me voy a disfrazar de vampiresa junto a mis amigos. Iremos a casa de uno de ellos y contaremos historias de espíritus. Quizá veamos The Ring", dice ilusionada.

La implantación de la cultura americana no sólo se queda ahí, Alicia explica que llevarán calabazas huecas, y que saldrán a la calle a gastar bromas.

Tres generaciones, tres maneras diferentes de vivir esta noche que, sin duda, se celebrará de una manera más pagana o más católica.

CONSULTA AQUÍ TODAS LAS NOTICIAS DE JAÉN