La siniestralidad laboral sigue dando sustos en la provincia de Cádiz y en la jornada de ayer se produjo otro accidente en la capital, donde un obrero se precipitó hasta el suelo en las obras que se están acometiendo en el Hospital de San Juan de Dios para convertirlo en una residencia geriátrica.

El accidente se produjo sobre las doce del mediodía y, según narró a este periódico el compañero que se encontraba justamente al lado, mientras tomaba una tila temblando del susto en el bar situado enfrente del hospital, se hallaban recogiendo escayola en el segundo piso del edificio cuando un tragaluz del suelo, que estaba cubierto a causa de las obras, se vino abajo como consecuencia del peso del obrero siniestrado, que había pisado sobre él.

Según el relato del compañero, que responde a las iniciales de M. G., el obrero tuvo relativa suerte, porque bajo el cristal que no soportó el peso había un techo de escayola que también se hizo añicos en la caída pero que, en todo caso, pudo amortiguar un poco el golpe que recibió el joven cuando se precipitó sobre el rasante.

La ambulancia del 061 se llevaba al joven lesionado en dirección al Hospital Puerta del Mar media hora después del infortunado suceso.

Según informaron a este medio desde el 112, el joven iba estable y sedado cuando se dirigía al hospital, con un diagnóstico de traumatismo craneoencefálico. Al cierre de esta edición, aunque no se había hecho una consideración de la gravedad de las lesiones, no se temía por su vida.

Hace apenas dos semanas que se produjo otro accidente similar en la capital gaditana. Pero en este caso resultó más alarmante si cabe, porque el obrero en cuestión trabajaba en situación irregular y la obra siniestrada contaba con algunas denuncias previas del vecindario.

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