El número de vecinos afectados por la ampliación del aeropuerto sigue siendo una incógnita. La primera estimación fijó la expropiación de 64 viviendas y tres naves. Esta cifra se incrementará, ya que  Aena necesita más terreno para la zona de servidumbre aérea y el pasillo aéreo, según fuentes municipales. Actualmente, la empresa estatal de navegación aérea está trabajando con el registro de la propiedad para localizar a los propietarios de las parcelas afectadas. Cuando acabe el proceso se conocerá el número exacto de personas y casas que han de derribarse y se iniciarán las negociaciones para su adquisición.