Por su parte, la constructora OHL se defendió de las críticas recibidas por los problemas surgidos en las obras del tren de alta velocidad (AVE) Madrid-Barcelona en el tramo del Gornal, en L’Hospitalet, y afirmó que los problemas son exclusivamente técnicos.

La compañía desmintió, en una nota, la información  que vinculaba las dificultades en las obras del AVE con la expropiación de parte de los terrenos de una mina propiedad de una filial del Grupo Villar Mir.

«OHL está poniendo todos los medios a su alcance para ejecutarla (la obra) en el mínimo plazo posible, con las mayores garantías de seguridad», afirmó la constructora.

Pese a estas justificaciones, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, se quejó de «sucesivas incidencias» en las obras y fue ella quien anunció que abrirá un expediente informativo para intentar esclarecer lo que ha pasado.

En medio de esta polémica con una de las constructoras de la línea del AVE a Barcelona, está previsto que el 31 de octubre, comparezca el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Congreso para explicar la situación de los trabajos del tren de gran velocidad y las afectaciones al servicio de Cercanías del área metropolitana de Barcelona.