El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, se prepara para desafiar las leyes antinepotismo del país al confirmar este lunes a su yerno Jared Kushner, esposo de su hija Ivanka, como asesor presidencial.

En un comunicado difundido por varios medios estadounidenses, la oficina del presidente electo informa que Kushner será asesor senior del mandatario y trabajará con Reince Priebus, jefe del gabinete, y Stephen K. Bannon, jefe de estrategia y asesor principal.

Kushner, un empresario inmobiliario y casado con Ivanka Trump, la hija mayor del presidente electo, es, además, un importante empresario inmobiliario en Nueva York.

"Kushner, un respetado hombre de negocios y desarrollador inmobiliario, participó en la formulación y ejecución de la estrategia detrás de la histórica victoria de Trump en noviembre", dice el comunicado. "Kushner ha decidido renunciar a su sueldo mientras trabaje en la Administración".

"Ha sido increíblemente exitoso en los negocios y ahora en la política", ha declarado Trump en el texto. "Será un valioso miembro de mi equipo y en la ejecución de mi ambiciosa agenda, que pondrá a la gente de Estados Unidos en primer lugar".

El nombramiento podría violar las leyes antinepotismo estadounidense, según destaca el Times, al ocupar un familiar cercano al magnate un puesto clave en la Casa Blanca.

Él comunicado destacó el papel que tuvo Kushner en la campaña electoral que culminó con los comicios del 8 de noviembre y dijo que su participación "fue instrumental para formular y ejecutar la estrategia" que llevó a la victoria a Trump en esos comicios.

La posibilidad de que el yerno de Trump se sume a su equipo se venían manejando desde hace varias semanas, lo que iba a representar desafíos personales para Jared Kushner porque tendría que desvincularse de sus negocios para poder asumir un cargo oficial.

Kushner es el director general de una compañía que está centrada en negocios inmobiliarios en Nueva York y en el vecino estado de Nueva Jersey y que desde 2007 ha completado transacciones por cerca de 13.000 millones de dólares, según datos de la empresa