Fernando Rey ha centrado su ponencia en la "necesidad de ser muy prudentes" a la hora de abordar la reforma de la Constitución española, debido a la necesidad de "un espíritu de concordia entre las diferentes fuerzas políticas" que ha asegurado que en este momento "no abunda".

"En una inundación lo primero que falta es el agua potable" ha asegurado Rey, quien ha apelado a "razones de prudencia política" para abordar una revisión se la Carta Magna que es "claro que hay que hacerlo" pero que, bajo su juicio, no posee "las condiciones necesarias para hacerlo".

A diferencia de las constituciones del resto de países, Rey ha explicado que la española sólo ha sido reformada "dos veces por la vía rápida, de forma un poco circunstancial", aunque ha confirmado la importancia de ambas reformas, "especialmente la última, que introduce la estabilidad presupuestaria", frente a la realidad europea donde "las Constituciones se reforman con cierta frecuencia para adaptarse a las circunstancias cambiantes".

El catedrático ha recordado que en España las constituciones no se cambian "salvo asesinato de la anterior", lo que para él supone una anomalía porque la Carta Magna tiene casi 40 años, de modo que existen derechos como "a la protección de datos o los ligados a la sociedad digital" que en 1978 "no estaban previstos".

Además, ha recordado que se han producido diferentes cambios que se han realizado por medio de la ley como "el derecho al matrimonio homosexual", lo que ha hecho que se haya acostumbrado a "cambiar la constitución sin cambiarla".

Por ello, ha insistido en que ahora "haría falta un cambio" pero "abrir el melón de la reforma constitucional" situaría a España "ante el fantasma tradicionales como comunidad política", entre los que ha citado ejemplos como "el debate entre monarquía y república" y la ordenación territorial. Una reforma para la que se necesita "mucha sensatez, mucha consistencia teórica y una actitud de diálogo".

El acto, organizado de manera conjunta por el Consistorio, la Diputación de León y la Junta de Castilla y León, ha contado con la participación de diversas autoridades como el presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, la subdelegada del Gobierno en León, María Teresa Mata, y el alcalde de León, Antonio Silván, quien ha asegurado que España pasa por un momento, "como en los tiempos de la transición" en el que "más se debe exigir permanecer en el espíritu del diálogo, el acuerdo, el entendimiento y el consenso".

Antonio Silván ha apelado a "la responsabilidad de quienes frivolizan con algo tan serio como la soberanía nacional" y ha proclamado su compromiso activo "con la defensa de la integridad de la nación y su soberanía y del ordenamiento jurídico del Estado", que ha calificado como la "base fundamental de la igualdad entre todos los españoles".