Este anuncio se produce tras la reunión que mantuvieron los líderes de los dos sindicatos con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y las organizaciones empresariales. Las protestas culminarán con una manifestación sindical y social el domingo, 18 de diciembre, en Madrid. Álvarez ha realizado esta declaración ante los medios durante la convención de la Federación de empleados y empleadas de los servicios públicos (FeSP) de UGT Asturias en Noreña.

Sobre la reunión, Álvarez ha señalado que "aparte de expectativas" sobre un ofrecimiento de diálogo no "han sacado nada más". En ese sentido, ha afirmado que "el dialogo por sí mismo no tiene ningún valor" por lo que el Gobierno "debería pasar de ofrecer diálogo a ofrecer negociación que ya tiene una base más sólida" y ofrecer "acuerdos porque ese es el camino que se tiene que poner en marcha en esta legislatura".

Álvarez ha explicado que esta movilización tiene como objetivo "exigir" al Gobierno que aborde en el Parlamento "políticas sociales para acabar con la situación de miseria que se vive en millones de hogares" en el país.

Entre estas medidas que debe aprobar el Parlamento ha mencionado que la Renta Mínima "debe convertirse en ley y tener dotación presupuestaria", debe implementarse un Plan de Empleo Nacional.

Finalmente, ha señalado que en la "pendiente" negociación sobre las subidas de salarios "no sirve sumar los aumentos de salarios de los cuatro años para que parezca que es una cifra bonita". "No, los funcionarios tienen que recuperar poder adquisitivo" y no "sólo tener el aumento con el IPC previsto", ha añadido categóricamente.

En esa línea, ha exigido también la reposición de las plazas de empleo público que no se ha realizado en "los últimos años" y una "convocatoria general de plazas en la función pública".

Ese es el objetivo de unas movilizaciones dirigidas a que el Gobierno "sienta el aliento de los ciudadanos un día sí y otro también" como la única manera de que el Gobierno cambie su posición y se derogue en el Congreso la reforma laboral de 2012.

Interrogado sobre si la adopción de esta medidas dificultaría el cumplimiento de los objetivos de déficit fijados desde la Unión Europea, Álvarez ha señalado que muchas de estas medidas no necesitan dotación presupuestaria y ha enumerado tres acciones que trasladaron ayer a Rajoy para que lleve a cabo.

Conseguir equiparar el nivel de fraude fiscal que se da en España con el de Alemania, permitiría recaudar 50.000 millones de euros que servirían para "hacer milagros, incluso pagando deuda pública". La segunda acción trasladada por los sindicatos ha sido la imposición de un tributo "sobre las grandes fortunas" y, por último, que encabece un proceso en la UE para "negociar y acordar" un nuevo cumplimiento de las previsiones de déficit para España.