En una nota de prensa, el Ejecuitvo regional explicó que el marisco incautado por los inspectores y los agentes fue capturado por dos mariscadores aprovechando las grandes mareas del plenilunio que tuvieron lugar la semana pasada.

Al ser sorprendidos, los individuos emprendieron la huida en un vehículo todoterreno, haciendo caso omiso de los requerimientos de los agentes, siendo interceptados después de haber arrojado del coche los dos sacos donde llevaban los mejillones y los útiles de pesca empleados para la captura.

En este caso, además de la sanción administrativa, que puede llegar a alcanzar los 60.000 euros al ser considerada una sanción grave según la Ley 17/2003, de 10 de abril, de Pesca de Canarias, se tramitará la correspondiente denuncia penal

por desobediencia a la autoridad.

Por su parte, el marisqueo del mejillón canario en Fuerteventura está prohibido por Orden de 16 de julio de 2004 debido a su preocupante estado de conservación, y sancionado por ley. Sin embargo, se trata de una especie muy cotizada por los mariscadores furtivos, que muchas veces la capturan por encargo.