Como explica el Instituto Armado en una nota, los hechos que dieron lugar a esta detención se iniciaron a finales de octubre, cuando agentes en servicio de protección de la seguridad ciudadana del puesto principal de Calahorra, procedieron a identificar a los cuatro ocupantes de un turismo.

Una de estas personas entregó para su identificación un permiso de conducir y una tarjeta de identidad portuguesa, en la que se podían apreciar diferentes anomalías.

Por ello, ante la sospecha de que los documentos fueran falsos, los agentes le informaron de que iban a trasladarlo a dependencias del Equipo de Policía Judicial, para constatar su plena identidad y verificar la autenticidad de la documentación.

Una vez son introducidas las huellas de este individuo en el Sistema Automático de Identificación Decadactilar (SAID), se constató que posee dos identidades diferentes una española y otra portuguesa, siendo verdadera la primera de ellas, figurándole también en ambas reseñas antecedentes policiales por diferentes hechos delictivos cometidos en España.

Las actuaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil y la Policía Judiciaria de Portugal, a través del Centro de Coordinación Policial y Aduanera (CCPA), determinaron que el detenido se creó una identidad ficticia para delinquir en ambos países con impunidad, tras haber conseguido la tarjeta de identidad y el permiso de conducir portugués por métodos ilícitos, que se están siendo investigados por ambos cuerpos policiales.